La Resiliencia es la capacidad de los seres humanos de adaptarse a las situaciones adversas, en Psicología es la capacidad que tiene una persona para superar circunstancias traumáticas como la muerte de un ser querido, un accidente o circunstancias en las que se han visto vulnerables.
Algunos especialistas afirman que la resiliencia está vinculada a la autoestima, debido a esto se recomienda trabajar el amor propio en niñas y niños pequeños, ya que esto los preparará para afrontar las situaciones que se presenten a futuro.
Después de diversos estudios por parte de la Psicología moderna se ha llegado a la conclusión de que existen ciertas características que comparten las personas resilientes algunas de ellas son:
- Saben detectar las causas de sus problemas.
- Personas que saben manejar o tener control de sus emociones.
- Mantienen la calma en situaciones de mucha presión.
- Personas realistas.
La resiliencia es una cualidad innata no está impresa en nuestros genes, aunque si puede haber una tendencia genética, que puede predisponer a tener un “buen carácter”. La resiliencia es algo que las personas aprenden porque han tenido en sus padres o en alguien cercano un modelo de resiliencia a seguir, sin embargo hay personas que han encontrado el camino por si solas, esto nos indica que todos podemos ser resilientes, siempre y cuando cambiemos algunos de nuestros hábitos o creencias.
Al igual que la flor de loto nosotros también tenemos la capacidad de elevarnos por sobre el barro, de florecer fuera de la oscuridad y de irradiar luz al mundo. La resiliencia es la capacidad de hacer frente a las adversidades de la vida, transformar el dolor en fuerza motora para superarse y salir fortalecido de ellas.
Una persona resiliente comprende que es el arquitecto de su propia alegría y su propio destino.